Las bolas vibradoras dan un paso más respecto a las bolas chinas tradicionales. En realidad, se las considera la versión 2.0 de las anteriores, porque incluyen tecnología de automatización para que se muevan en el interior de la vagina del modo optimo. Así, proporcionan una tonificación y un refuerzo progresivo del suelo pélvico, además de agradables sensaciones erógenas.
Existen modelos con control remoto y versiones inteligentes que indican sobre cuándo contraer o distender los músculos en cuestión.